A veces pienso que hay tantas cosas que aún
merecen la pena. Y me distraigo, y miro hacia
otro lado ahora que nadie me ve.
Me traiciona un pensamiento que me hiere y
despierta mi conciencia.
Por eso grito desde la distancia
y no me quedo pegadita en mi rincón.
Hoy canto a los que sufren,
inocentes que han caído
ante mis ojos ya gastados
demasiado saturados
de la pena que me llena
cuando miro lo que pasa
y lo que pasa en realidad
es que aún me quedas tú
y sólo tú y eso es lo mejor.
Quién soy yo para juzgar
lo que la gente dice o hace,
o para decidir lo que ahora está bien
o ahora está mal.
Sólo soy un trovador en falso,
una voz que grita en el vacío,
una minúscula mayúscula
que a veces cuenta todo lo que ve.
Hoy canto a los que llorar
por aquellos que se han ido
ante mis ojos ya gastados
demasiado saturados
de la pena que me llena
cuando miro lo que pasa
y lo que pasa en realidad
es que aún me quedas tú
y sólo tú y eso es lo mejor.
No sé si las palabras todavía sirven para algo
o si es mejor medir los gestos
y observar sin ofender.
Hombres surgen con banderas, razas, dioses,
himnos y señales levantan las fronteras que mañana otros van a derribar.
Porque al final vendrá la verdad.
Llegará la paz y seremos mejores.
Sé que hay muchos más
que van a cantar dándome sus voces.
A veces me siento llena de vida y quiero compartirlo
gritarlo, decirlo a los que quiero y amo por igual.
Sólo una frase más para decir que
hay tanta esperanza.
hoy canto a los que bailan y sonríen a la vida,
a los que sienten alegría y me llenan de ilusiones
de la vida que me llega cuando miro lo que pasa
y lo que pasa en realidad es que aún me quedas
tú y sólo tú... es lo mejor