Con todas estas páginas he construido
mi mansión en una zona alta de la ciudad,
soleada y residencial.
Me llegó a ofrecer —y era una ganga- mano
de obra infantil cierta gran multinacional.
Claro, yo la rechacé.
No saben la de cosas que se escuchan cuando
tus paredes son todas de papel.
Anoche oí a dos tipos planear una guerra nuclear
mientras me hacía un té.
Y a veces oigo a las ratas
que roen la pared.
Les doy papel de estraza
del que uso yo para sacar la tinta de la piel.
Y vivo así en mi palacio de papel.
Se está bien aquí, se está bien.
La mujer del tiempo anuncia un vendaval,
pero no me iré; resistiré.
Y se oyen voces que hablan de deshauci
y sé que quieren derribar mi humilde mansión.
Al parecer pretende abrir aquí una nueva boutique
un tal Louis Vuitton.
Puede que lo hable con él...
O puede que me atrinchere aquí,
y como cualquier animal ya sabré lo que hay que hacer.
O entienda que si no pierdo la fe es porque
jamás llegué a tener una que perder.
Pero en veintiocho años,
vean que la reconstruí
con estas sucias manos
un millar de veces y sigo viviendo así,
como un rey en mi palacio de papel.
Se está bien aquí, se está bien.
La mujer del tiempo anuncia un huracán,
pero no me iré; resistiré.
Y si hay un fuego aprenderé a arder.
Y si empiezo a arder aprenderé a apagarme.
Y vivo así en mi palacio de papel...
(Tengo una razón y volveré a ACTUAR.)
(No hay IMPUNIDAD pero voy a actuar.)
N. V. CONTRA LA INDUSTRIS DEL DISCO
El sol se pega a mi piel como un gusano de mar.
Sé que he estado aquí con anterioridad,
y nadie va a mirar por mí esta vez
cuando el alma se me caiga a los pies.
Hay un hombre y me observa;
puedo oírlo disfrutar.
Hoy comienza una guerra
en la que todos quieren hablar,
y aunque todos quieran hablar
no dirán
la verdad.
El hambre aprieta y yo me siento igual
que un tipo deshollao que se quiere rascar.
De la misma triste y solitaria canción,
¿podría yo enfermar, igual que el viejo Townes?
Unos mueren de asco;
otros mueren de amor,
pero desde Madrid hasta El Cairo
todos quieren hablar,
y aunque todos quieran hablar
no dirán
la verdad.
Y guárdate tus consejos
porque yo ya estuve allí
cuando tú formabas parte de ellos,
de los que quieren hablar.
Y aunque todos queráis hablar
no diréis
la verdad.