Cuando entras en el bar,
Vestida como una estrella,
Balanceándote con tus tacones de aguja que dicen f***ame.
Y los hombres se fijan en tí,
Con tu conjunto de bolso de Gucci,
No sé a quién mira.
Porque todos sois iguales,
Todos saben tu nombre,
Y ésa es tu fama.
Nunca te pierdes ninguna noche,
Porque el sueño de tu vida,
Es ser la mujer de un futbolista.
No te gustan los jugadores,
Eso es lo que dices,
Pero no te importaría un millonario.
No te gustan los futbolistas,
No te dicen nada,
Pero te gustaría un hombre rico de 2 metros o más.
Eres más que una aficionada,
Buscando un hombre,
Pero acabas siempre con rollos de una noche.
Él podría ser el hombre de tu vida,
Si fuera más de una noche,
Pero esa parte nunca funciona.
Por la mañana, estás irritada,
Él ya está por la siguiente,
Y tú aún no le cogiste el gusto.
No te preocupes demasiado,
Si piensan que eres una fulana,
Porque, igual que las noticias de cada día, te deprimes.
No te gustan los jugadores,
Eso es lo que dices,
Pero no te importaría un millonario.
O esos futbolistas grandes,
No te dicen nada.
Pero te gustaría un hombre rico de 2 metros o más,
No te puedes sentar bien,
Porque tus vaqueros son muy ajustados,
Y tienes suerte, es la noche de las mujeres.
Con tu enorme monedero vacío,
Empeora cada semana,
Por lo menos tus pechos cuestan más que los suyos.
Hiciste Miami,
Porque llegaste gratis allí,
Pero perdiste el avión de alguna manera.
Hiciste demasiado,
Encontraste a alguien,
Y pasaste la noche castigada.
Sin chicas como tú,
No habría gracia,
Iríamos a la discoteca y no veríamos a nadie.
Sin chicas como tú,
No hay marcha nocturna,
Los hombres se irían a casa con sus esposas.
No te enfades conmigo,
Porque casi tienes los 30,
Y tus viejos trucos ya no funcionan.
Deberías saber del trabajo,
Que siempre te dejan,
Desempolva tus tacones de aguja que dicen f***ame.