Pastora es una propuesta audiovisual que desde que se creó en 1996 se desarrolla en Barcelona. Sus fundadores son dos hermanos Pauet Riba (diseñador de joyas y grafista) y Caïm Riba (músico muy aficionado a la informática). En sus comienzos Pastora estaba enfocado al directo: una combinación sorprendente de imágenes de corte psicodélico dejadas a la improvisación y música envolvente, un territorio casi inexplorado en el panorama musical español.



En el año 1998 Pauet y Caïm editaron su primer trabajo, titulado Trip show audiovisual tecno sinfónico. Este disco era un homenaje a su madre, Mercè Pastor, de quien proviene el nombre del grupo.

Con ya dos discos publicados, Pastora continuó evolucionando y en el año 2000 Dolo Beltrán, actriz de teatro, se incorporó al proyecto aportando su voz y sus composiciones. Por tanto, a partir de ese momento, Pastora es una mezcla de músicas, letras e imágenes.

La aparición del primer disco

como trío de Pastora, titulado con el nombre del grupo, los situó como una nueva alternativa llena de futuro dentro del pop español. Consiguieron el Disco de Oro por sus más de 50.000 copias vendidas, fundamentalmente debido al éxito de su single promocional Lola. Aunque también son destacables canciones como Lunes o Mirona.

Pastora supone una propuesta alternativa sustentada en la voz y las letras de Dolo, los arreglos y la música de Caïm y el concepto visual de Pauet. Las letras se salen de lo convencional debido a su originalidad, por ejemplo, en Archivo de palabras tristes: qué lento es el coco cuando tiene que aprender siempre se queda corto.

Su segundo disco como trío, La vida moderna, da una vuelta de tuerca a su música. Ha sido producido por Caïm Riba y Carlos Cárcamo (creador de Granada en el año 1975, que fue uno de los grupos representativos del rock del sur). La vida moderna equilibra músicos y máquinas: se mantienen las programaciones (de Caïm Riba, Ángel Riba y Carlos Cárcamo) y se unen las guitarras de Jero Castellá, Dayan Abad y el mismo Caïm; los teclados y el piano de Vicente Borland; el contrabajo de Yelsi Heredia y el bajo de Ferrán Ochoa; la batería de Pau Josa; los violines, los cellos, los coros...

La vida moderna consta de 13 canciones que ofrecen imágenes, ambientes y arreglos muy distintos entre sí, siendo considerada la última pista del álbum, Planetes marins, la mejor canción cantada en catalán del año 2006 en la Décima Edición de los Premios de la Música.

Canciones como Día tonto o Archivo de palabras tristes están muy vinculadas con el anterior trabajo de Pastora, tanto en la música como en las letras que compone Dolo, tenemos un ejemplo en Día tonto: No puedo dejar de llorar, tengo el día tonto. De esos que por más que salte toco el suelo pronto. Pero, en otras canciones, Pastora aparece diferente, como por ejemplo en Invasión o Desolado, que se sustenta en un piano acústico que forma parte de un medio tiempo intenso. Sin duda, temas más evolucionados y con, quizás, un mayor riesgo musical.